En un mundo lleno de males, siempre hay que buscar lo positivo. Y la agrupación saltillense Low Country, lo entiende perfecto. Tan así, que su filosofía gira justo en torno a ello: enviar mensajes de esperanza y luz a través de sus composiciones musicales que cada vez llegan a más oídos no solo en la región, sino, en todo el país.
TE PUEDE INTERESAR: La Maldita Stampida, los rockteños de corazón saltillense
Ser un vaquero contemporáneo y proyectar valores que defienden el estilo de vida country nunca fue tan enriquecedor como lo es para Edgar Silva, la voz principal, Omar Vázquez “Choy”, el violinista, Omar Delgadillo, bajista y Ricky Mellado en la guitarra eléctrica; músicos que forman parte de este conjunto que nació hace ya ocho años y que desde entonces no ha parado de crecer y ganar el merecido reconocimiento que han logrado con base en el esfuerzo y, sobre todo, la pasión y gusto por la música.
EL ESTILO DE VIDA DE UN VAQUERO CONTEMPORÁNEO
El “guion” estaba escrito para Low Country desde el principio. Edgar, quien además de ser el vocalista, es el fundador, siempre tuvo en mente lo que quería: formar una banda country -el género que disfrutaba desde que era pequeño- y convertirla en todo un ícono de ese estilo de vida que tanto ama.
Durante algunos años, estuvo insistiendo con un amigo de él que ya pertenecía a otro grupo, pidiéndole que le dieran forma a la idea de constituir una agrupación de ese tipo de música. Finalmente sucedió pero no terminó de convencerlo porque, si bien en papel tenía bien planteada la idea que quería proyectar, al llevarlo a la acción no le gustó el resultado.
Fue entonces cuando comenzó a unir las piezas del rompecabezas, para después darle vida a la alineación actual que conforma Low Country.
Para su fortuna y “sin querer” la ciudad ha ido evolucionando en el tema, adquiriendo como suyo este género, lo que les ha permitido los ocho años de existencia de Low Country.
Y, al día de hoy, lo que más lo hace sentir orgulloso -a él y a sus compañeros- es justo eso, su música. Que se escuche y llegue a otros lugares. Si bien, reconocen que hace falta mucho camino por recorrer, saben que han avanzado mucho y que sus canciones son muy reproducidas.
‘SER’, UNA CANCIÓN QUE LES DIO UN NUEVO GIRO
El último sencillo que Low Country publicó, se llama “Ser” y desde su creación, supieron que iba a llamar la atención y a ayudarles a dar un salto más alto. Todo esto, reconociendo su crecimiento profesional. A partir de ese día, agosto del 2023, su canción llamó mucho la atención y esa es una de las recompensas que más atesoran en sus corazones.
Siguiendo esa línea, están explorando nuevos temas que saben que los impulsarán aún más y que nacen desde la profundidad de las almas western que conectan con gente de todas las edades, especialmente con los jóvenes.
Es por eso que se están preparando para su nuevo lanzamiento, que está por llegar más pronto de lo esperado.
Edgar, adelantó para RODEO CAPITAL que la temática va de la mano de un mensaje de unidad e inclusión, enfocado a las mentes jóvenes sobre lo que quieren ser; que no importa dónde estés “si te hallas en un terreno sombrío, siempre encontrarás justo lo que quieres”. El cantautor inclusive brindó una línea de la letra en la que dice “buscando la gloria” como una “probadita” del mensaje que está enfocado a temas de género y de raíces.
Cabe mencionar que todas las canciones son escritas por él, mientras que la música es compuesta por el resto de los integrantes del grupo de la mano de su productor César Toro, un joven regiomontano que Edgar calificó como “muy talentoso”.
ESTÁN, SIN QUERER, EN EL TERRITORIO INDICADO
Para nadie es un secreto que en los últimos años, el country ha sido un género que ha cambiado mucho y que ha sido reconocido de sobre manera. Gente que, probablemente nunca se había puesto un sombrero o botas, ahora lo está haciendo y esto beneficia directamente -pero sin esperarlo- a Low Country, quienes se sienten muy felices de ser parte de ello.
Como es bien sabido, Saltillo es reconocida como una ciudad 100% vaquera y la “oleada” se está extendiendo por todo Coahuila; la afición al rodeo y a la música country ha encontrado una cuna muy cómoda en la región.
Y, de nueva cuenta, todo está relacionado con los temas que el género abarca: la vida sencilla, simple, que habla del amor, el trabajo honesto y demás asuntos que no hacen daño a nadie y que ayudan a que más personas se identifiquen con él. Aquellos relatos del joven enamorado o de la mujer esperanzada en el amor, son conexiones que agrupaciones del mundo western entienden a la perfección y fortalecen con sus audiencias, quienes adoptan el estilo de vida vaquero a su modo.
DE REGRESO A LOS INICIOS: LO QUE LA GENTE PIDE
Low Country, generalmente, tiene proyectado cada año para ver a dónde se quieren enfocar. En el 2023, por ejemplo, estuvieron concentrados en festivales y eventos privados, y aunque les fue muy bien, había personas que pedían un lugar más cercano donde pudieran disfrutar de su música: “es que yo no puedo ir a Monterrey a un festival” o “no puedo pagarles un evento privado”... “vengan al menos una vez a un bar para verlos, si puedo pagar una cubetita en un bar”, eran algunas de las frases de sus fanáticos.
TE PUEDE INTERESAR: Vivian Ruiz, la nobleza de un corazón tricolor y vaquero
Y escuchando las peticiones del público, que finalmente son quienes los han apoyado desde el día uno, volvieron al inicio. Este 2024, al abrir su oferta de nueva cuenta a los bares de la ciudad, empresarios y dueños de este tipo de lugares, no han parado de escribirles y buscar agendar una presentación con ellos, lo que se traduce en un éxito total. Especialmente cuando la gente les pide canciones y que sigan compartiendo su música. “Creo que no nos equivocamos en volver al origen”, confiesa Edgar.
Siempre será la satisfacción y el estilo que Low Country tiene con sus fieles seguidores, lo que los hace seguir su pasión y disfrutar cada segundo sobre el escenario. Tocar frente a 35 mil personas -hasta el momento su audiencia más grande, en una final de un rodeo en Querétaro- es una de las noches que más han disfrutado. Están conectados con la sensación indescriptible de subirse a una tarima. Y la gente lo nota.
La agrupación 100% saltillense, está más que preparada para continuar compartiendo su música y alcanzar sus más grandes sueños. Unos que toman forma en cuatro cuerpos vestidos con botas, pantalón y sombrero, de esos que todos conocemos como un vaquero contemporáneo.
